Pollensa es sin duda uno de los pueblos más populares en el norte de Mallorca -tanto entre los turistas internacionales como entre los residentes-. Se trata de un pueblo histórico en los pies de la Serra de Tramuntana. Las casas tradicionales mallorquinas y sus amables habitantes complementan la imagen del tÃpico pueblo mediterráneo. Paredes de piedra clara y pintorescos callejones forman la guinda del pastel. Descubrir el calvario con sus 365 escalones en medio del pueblo es una experiencia inolvidable, ya que la cima ofrece unas vistas panorámicas sin igual sobre el pueblo mismo y su entorno. Pollensa goza de un gran número de excelentes restaurantes y cafés para todos los gustos. Los amantes del deporte encontrarán a pocos minutos en coche el golf de Pollensa. Todos aquellos que prefieren vivir con más tranquilidad y privacidad, estarán encantados de la exclusiva zona residencial de La Font, que se encuentra a pocos minutos del centro de Pollensa.
Pollensa es un pueblo tradicional que, a pesar de años del turismo, nunca ha perdido su autenticidad.
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Después de un corto viaje en coche desde Pollensa se llega al Puerto de Pollensa con su club náutico internacional y el famoso paseo marÃtimo. Es el lugar perfecto para todos los amantes de deportes náuticos y acuáticos, pero también para familias, ya que la playa, con sus aguas pocas profundas, está muy cerca. Al haber sido reformado hace poco, el paseo marÃtimo ahora ofrece mucho espacio para dar un paseo durante el dÃa o durante el atardecer disfrutando de las magnÃficas puestas de sol de Mallorca. Puerto Pollensa brilla por su extensa oferta de casas vacacionales, restaurantes exquisitos y cafés modernos. Uno de los encantos del pueblo es que todo está accesible a pie.
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Cala San Vicente, ubicado solamente 5 minutos de Pollensa, es el destino ideal para dar un chapuzón en los dÃas más calurosos del año. Sumergiéndose en las aguas cristalinas se olvida del estrés y el dÃa al dÃa. Cala San Vicente destaca por su impresionante paisaje con montañas y la tranquilidad de sus pintorescas calitas y playas. Las calas se caracterizan por la belleza de las montañas y el agua cristalina que invita a hacer snorkel y piragua. La urbanización con encanto es muy popular entre todos aquellos que quieren disfrutar de la vida mallorquina con toda su tranquilidad, lejos del jaleo y estrés. Además de las fantásticas playas, Cala San Vicente goza de unos excelentes restaurantes que son conocidos por la gran calidad de sus platos de pescado fresco.
Los preciosos pueblos de Pollensa y Puerto Pollensa se encuentran a solamente pocos minutos en coche y, gracias a estar muy bien comunicado, se llega a Palma en poco más de 40 minutos.
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Crestatx es una urbanización tranquila, y perfecta para familias, ubicada en el norte de Mallorca entre los pueblos de Sa Pobla y Pollensa. Antes, esta zona estaba conectada con Pollensa, pero rápidamente se estableció como zona residencial autónoma. La ubicación estratégica y la escuela internacional que se fundó hace poco hacen que las casas de aquà ganen cada vez más popularidad. Crestatx está muy bien comunicado, la autopista que conecta con toda la isla está a tiro de piedra y hasta Cala San Vicente y el Puerto de Pollensa se llega en menos de 15 minutos.